27/07/2019 / Gozón

PEDRO PASCUAL (Luanco)

 

Los cambios en el tráfico en la calle Oviedo no convencen ni a vecinos ni a hosteleros. Alguno de ellos no solo asegura haber notado un mayor caos en la circulación, sino que algún negocio del entorno está directamente perjudicado. Es el caso de la Pulpería Foys, que se ha visto obligada a retirar ocho de las 18 mesas de su terraza para que los camiones de reparto puedan girar desde la calle Oviedo a la izquierda por Ortega y Gasset para salir a la calle España. «La Policía Local nos las hizo retirar porque no se podía realizar el giro», recuerda el gerente del establecimiento. 

 

El perjuicio económico es evidente para este negocio, que abre durante los fines de semana del invierno y todos los días durante los meses de verano. Con la nueva regulación del tráfico, la pulpería se queda casi con la mitad de la terraza inhabilitada y calcula que pierde «cien euros, tirando por abajo, con cada mesa por día».

 

FUERTE FACTURACIÓN EN

ÉPOCA ESTIVAL

Es decir, alrededor de 800 euros diarios durante los dos meses de temporada alta en la villa. En torno a 48.000 euros menos de facturación en la época estival.

 

 

 

 

 

 

Los gerentes del establecimiento aseguran que «desconocíamos que iba a haber estos cambios, de haber sabido que no íbamos a poder poner toda la terraza, nos hubiésemos planteado abrir el restaurante y todavía estamos pensando qué vamos a hacer», explican desde el negocio. 

 

Como solución a estos problemas, en la Pulpería Foys plantean que «la carga y descarga se haga hasta las doce o la una y luego se mantengan las terrazas», ya que «esta calle está guapísima así». 

 

El autónomo asegura que «también los vecinos se quejan de la nueva regulación, antes estaba mejor para todos» y explica que «han ido a quejarse al alcalde, pero dice que él no puede hacer nada. Pues si él no puede...».  A juicio del empresario, «hay un grupo de tres o cuatro que no quieren que los que no somos de aquí tengamos negocios, pero no se dan cuenta de que hay para todos». A ese grupo achaca «estas decisiones, que se toman adrede, y desde el Ayuntamiento no dicen nada». 

 

La calle Oviedo se reformó antes del verano, sin cambios en la dirección del tráfico, pero a finales de junio se tomó la decisión de cambiar el sentido de la circulación desde la calle Hermanos González Blanco hacia Ortega y Gasset, una medida controvertida que no ha gustado a parte del vecindario.